EQUO promueve la Europa de las personas

EQUO afronta las Europeas de 2014 con confianza para competir por una Europa de las personas. El referente en Euskadi del Partido Verde Europeo, actualmente cuarta fuerza política en el Parlamento Europeo, afronta el reto de cambiar la Unión Europea, que sufre una profunda crisis económica, ecológica, social y democrática. Europa no ha sabido hacer frente a los efectos de la gran recesión económica iniciada en 2008: el paro, la crisis de la deuda o la brecha entre países del norte y periféricos del sur. Al contrario, las políticas de austeridad pensadas para mitigar los efectos de la crisis, han afianzado un modelo más injusto y regresivo, que nos acerca hacia el punto de no retorno en el consumo de recursos naturales y por tanto resulta insolidario con los europeos y europeas del mañana.
La Unión Europea arrastra además una grave falta de democracia real. Sus instituciones se alejan cada vez más de la ciudadanía a causa de la complejidad burocrática y de la falta de transparencia. La ciudadanía europea está perdiendo la confianza en unas instituciones dominadas por lobbies que defienden los intereses de una oligarquía económica, financiera y política que impone recetas para consolidar sus privilegios a costa de acrecentar las desigualdades sociales.
Sin embargo en un mundo globalizado se necesitan estructuras supranacionales para hacer frente a las amenazas y retos que los estados de la UE no pueden asumir en solitario: el cambio climático, la crisis energética, la evasión fiscal, el poder de las corporaciones financieras o empresariales. Por eso EQUO rechaza el antieuropeismo, que no es sino una receta ya fracasada del pasado. Pero EQUO tampoco comparte las fórmulas de quienes se dicen europeístas y han sido cómplices de las políticas de austeridad que han provocado la situación actual.
EQUO apuesta por más Europa y por los valores que impulsaron la integración europea: paz, libertad, solidaridad, lucha contra la pobreza, la xenofobia, el odio y la discriminación. La libertad, los derechos y la sostenibilidad no se pueden seguir erosionando. Al contrario, éstas deben ser precisamente las bases sobre las que construir el futuro. EQUO forma parte de un impulso de esperanza que va más allá de etiquetas políticas, que quiere construir desde la ciudadanía la alternativa a estas políticas que han viciado el espíritu europeo. Por eso apuesta por un cambio radical para dar contenido al «sueño» de Europa. En EQUO nos declaramos europeístas insumisos, decididos a no repetir los errores cometidos para salir de la crisis. Reclamamos la necesidad de una revolución verde transformadora de la economía, generadora de empleo y respetuosa con el planeta, que permita a Europa recobrar la confianza en su futuro.
La Europa que EQUO propone es una Europa de las Personas, federal, plural, solidaria y justa, en la que todas las regiones y culturas estén representadas en su diversidad cultural y lingüística. Una Europa que sea un ejemplo para el mundo en la defensa de los derechos humanos, sociales y digitales. Una Europa que aborde la gran transición del continente hacia la sostenibilidad ecológica y económica.