- El partido verde advierte de que el gasto final de las obras del tramo paralizado del Topo podría alcanzar casi el doble del precio inicial establecido, la desorbitada cifra de 135 millones para ese tramo
- La formación ecologista reclama responsabilidades políticas ante esta “flagrante falta de previsión y sangría de dinero público”
EQUO Berdeak Gipuzkoa considera necesaria la realización por parte del Tribunal Vasco de Cuentas Públicas de una auditoría que clarifique cómo se han hecho los cálculos del coste de las obras del Topo de Donostia dado los cuantiosos sobrecostes que se van a generar.
El propio consejero de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes, Iñaki Arriola, ya ha reconocido que este incremento puede llegar a ser del 70%. Tras este anuncio y sumado el 20% de sobrecoste generalmente previsto en los pliegos y que sistemáticamente se da en el caso de grandes infraestructuras, EQUO Berdeak Gipuzkoa advierte que el gasto final podría alcanzar casi el doble del precio inicial establecido, la desorbitada cifra de 135 millones para ese tramo, a lo que habrá que añadir el IVA que encarecerá aún más la factura final.
Ante esta “flagrante falta de previsión y sangría de dinero público” considera indispensable la intervención del órgano fiscalizador para que dictamine si se han cometido irregularidades en el proceso y en base a ese informe, que se depuren después responsabilidades políticas. “La ciudadanía vasca tiene derecho a saber por qué los problemas encontrados no pudieron ser previstos, evitándose así el sobrecoste presupuestario por la aplicación de nuevos tratamientos para solucionar los problemas sobrevenidos y también tienen derecho a saber quiénes son responsables de esa hemorragia de dinero público”, apuntan desde el partido verde.
La formación ecologista, representante del Partido Verde Europeo en Gipuzkoa, se ha mostrado muy crítica con los procedimientos de contratación. El importe máximo de licitación establecido por Euskal Trenbide Sarea – ETC – fue de 71 millones de euros, pero la empresa contratista seleccionada para hacer la obra había propuesto un presupuesto de 53 millones, es decir 25% menos que lo estimado por la Administración. «Este hecho ya es señal de que algo está fallando en los procedimientos de contratación. Una rebaja de esa magnitud no es posible si no lleva aparejada una merma en los análisis – y de ahí los consiguientes imprevistos- en los materiales, la ejecución o en las condiciones laborales», sostienen desde el partido verde.
EQUO Berdeak Gipuzkoa denuncia además que el diseño de la pasante de metro por Donostia tiene graves deficiencias, tal y como lleva años denunciando el movimiento vecinal Satorralaia. Entre las carencias apuntan la falta de conexión con la estación de tren y de buses y el incumplimiento de las normativas de seguridad en la salida de emergencia de Pío Baroja. “No se posibilita el acceso de vehículos de rescate para facilitar la intervención de los servicios de emergencia, se incumple la distancia máxima exigida entre salidas de emergencia y no se cuenta con un dispositivo alternativo para permitir la evacuación de personas con movilidad reducida. Roza el cinismo gastar tantos millones agujereando el subsuelo para un proyecto que nace con tantas lagunas». Por todo ello, el partido verde registrará ante el Gobierno Vasco una reclamación del expediente de la obra.
Según la formación ecologista, el Gobierno Vasco ha perdido toda credibilidad respecto a esta actuación. «Varias personas ya denunciaron en el inicio de las obras la aparición de grietas, pero ETS minimizó el problema. Después se abrió un gran socavón en un edificio de la calle Zubieta y el director de ETS lo calificó de mero percance. Ahora sabemos que se enfrentan a un problema grave y peligroso que puede costar decenas de millones de euros a la ciudadanía vasca», afirman desde el partido verde que manifiesta su respaldo a la convocatoria de manifestación organizada por el colectivo Satorralaia el día 14 de noviembre.