EQUO Donostia realiza un gesto para promover los huertos ecológicos urbanos

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El pasado jueves 7 de agosto, componentes de EQUO Donostia decidieron plantar plantas, brotes y semillas en una decena de copas de la barandilla del paseo de Francia en Donostia. Las plantas crecidas han sido robadas, enseguida reemplazadas por otros brotes y las semillas han brotado.
Esas copas, que hasta entonces servían de papelera para colillas de cigarrillos, botellas de plástico y residuos diversos, albergan ahora plantas cuyos frutos podrán ser cosechados libremente por cualquier persona.
Ese gesto del partido ecologista constituye el primer paso de la reivindicación para tener huertas urbanas ecológicas y céntricas, comunitarias y libres, o gestionadas por el ayuntamiento. Tener huertas urbanas constituye el primer paso hacia la soberanía alimentaria y una reconexión ciudadana con la naturaleza, su cuidado, y el respeto de sus ciclos.
La iniciativa se enmarca dentro del movimiento de los “increíbles comestibles” (“incredible edible”), una idea que vio la luz en Todmorden (Inglaterra) en 2007. Consiste en plantar frutas y verduras en lugares públicos cuidados por la ciudadanía y recolectados por cualquier persona que los necesite.
El movimiento se ha extendido hasta estar presente en todos los continentes y en países tan inesperados como Togo, Qatar o Haiti hasta llegar muy cerca de nosotras a Baiona.
EQUO Donostia llama a toda la ciudadanía y a las representantes de las instituciones interesadas en desarrollar el concepto a contactar en la dirección equogipuzkoa@proyectoequo.org. Pero además EQUO quiere ir más allá de las plantaciones esporádicas:
Elaborar un mapa de huertos urbanos potenciales en Donosti y otras ciudades guipuzcoanas donde surja interés.
Crear colaboraciones con otras iniciativas de otras ciudades.
Difundir el concepto en Euskal Herria.
Informar a la ciudadanía.
Realizar colaboraciones con las instituciones públicas o privadas.
Promocionar la educación agrícola.
Cuidemos nuestro barrio, cuidemos nuestra ciudad, cuidemos nuestro entorno. Lo que no podemos hacer institucionalmente, lo hacemos como vecinas y vecinos.