- La coalición Elkarrekin Podemos reclama un informe independiente sobre el impacto del proyecto e insta a su suspensión del mismo hasta que quede acreditada su necesidad para la transición energética y su viabilidad económica.
- “Existe una preocupación creciente en la sociedad vasca ante un posible incremento de la factura eléctrica como consecuencia del alto coste de ejecución de esta megainfraestructura. Se han presentado más de 6.800 alegaciones” ha resaltado el parlamentario José Ramón Becerra.
Elkarrekin Podemos ha registrado una PNL para su debate en Pleno que obligará al Parlamento Vasco a posicionarse sobre la interconexión eléctrica submarina Gatika-Cubnezais.
Se trata de una perforación marina subterránea sin precedentes en el mundo, una línea eléctrica de 370 km de longitud para conectar Euskadi con la zona sur de Francia a través de un cable submarino La afectación de la superficie marina corresponderá, como poco, al Golfo de Bizkaia, desde el cabo de Matxitxako a lo largo de toda la costa vasca hasta la mediana marítima francesa. Pero la mayor complejidad del proyecto surgirá en el tramo que requerirá cruzar el Cañón de Capbretón por una zona de profundidad máxima de 1.500 m.
Al impacto medioambiental se suma otro, el económico -dado el alto riesgo de sobrecostes debido al desafío técnico que implica una obra de esta envergadura-. Según el acuerdo de reparto, serán las personas y empresas consumidoras de electricidad en España las que soporten estos sobrecostes de forma mayoritaria. Solo el coste del proyecto ya asciende a 1.870 millones de euros.
Por todo ello, Elkarrekin Podemos considera “razonable que, en aras del principio de precaución” el proyecto quede en suspenso hasta que se demuestre su necesidad para el sistema energético, su contribución a los objetivos climáticos y de renovables y su viabilidad económica y así lo solicita en la PNL registrada para su debate en Pleno.
La coalición recuerda que la oposición de parte de la sociedad vasca hacia el proyecto de Red Eléctrica Española se ha materializado en las más de 6.800 alegaciones presentadas. “Existe una preocupación creciente en la sociedad vasca ante un posible incremento de la factura eléctrica como consecuencia del alto coste de ejecución de esta megainfraestructura. Se han presentado más de 6.800 alegaciones” ha resaltado el parlamentario de Elkarrekin Podemos y miembro de EQUO Berdeak, José Ramón Becerra.
En la proposición se reclama la elaboración de un informe independiente sobre el impacto de la interconexión submarina que incorpore un estudio detallado en relación a su contribución a la seguridad energética, reducción de emisiones, penetración de energías renovables e impacto en el precio de la electricidad, así como una valoración económica de los mismos en relación a los costes y riesgos del proyecto. “Muchas preguntas a día de hoy siguen sin respuesta. Aún hoy no se disponen de informes que demuestren de forma rigurosa la contribución del proyecto a la seguridad energética, a la bajada de los precios de la electricidad o a la penetración de las energías renovables. De hecho, el reciente informe del Comité de Expertos sobre la Transición Energética revela muchas dudas sobre las interconexiones eléctricas en cuanto a su contribución a la reducción de emisiones. En este documento incluso dejan abierta la posibilidad de que estas infraestructuras aumenten el precio de la electricidad”, ha recalcado Becerra.
En la misma línea, hasta que no se aclare el futuro de la interconexión Gatika-Cubnezais en la propuesta a debatir se pide que el Parlamento Vasco inste al Gobierno de España y a las instituciones vascas a paralizar los trabajos de expropiación de terrenos y construcción de la línea eléctrica de alta tensión Güeñes-Itxaso.
De forma paralela, la diputada de Unidos Podemos y miembro de EQUO, Rosa Martínez, ha solicitado la comparecencia en la Comisión de Transición Ecológica de la Ministra de Transición Ecológica para que informe sobre la posición favorable al proyecto defendida por España en la cumbre sobre interconexiones energéticas del pasado 27 de julio en Lisboa y pedirle la suspensión temporal del mismo.