Hoy, en Comisión de Empleo y Desarrollo Económico, Oscar Fernández ha preguntado por el anuncio del Alcalde en el Pleno del Estado de la Ciudad de apostar por la industria 4.0 para Vitoria-Gasteiz. El concejal ha incidido en la necesidad de analizar si la apuesta por este tipo de industria es adecuada para la ciudad, si se ha analizado la destrucción de empleo que conllevaría y por qué se descarta una transición hacia una industria más verde y sostenible.
La apuesta por la industria 4.0 traerá consigo una pérdida de puestos de trabajo. A nivel mundial, en el foro de Davos, se presentó un estudio que indica que la digitalización de la industria supondrá la pérdida de 7.1 millones de empleos y la creación de 2.1 millones para 2020. Estudios en España señalan que un 12% de los empleos actuales podrían verse afectados por esta robotización. Oscar Fernández ha preguntado al Gobierno si, antes de anunciar la apuesta por la Industria 4.0, ha valorado lo que supone en destrucción de empleo.
Por otro lado, Fernández insiste en que este tipo de industria digitalizada únicamente sirve para robotizar los procesos de producción, pero que no aporta soluciones a la cuestión de fondo: ¿cómo crear un modelo económico e industrial diversificado en Vitoria-Gasteiz? Fernández ha destacado que el peso de la automoción en la ciudad, con dos grandes empresas que absorben una gran mayoría del empleo y con un sinfín de empresas auxiliares que, en la actualidad, suponen el motor industrial de Vitoria-Gasteiz. “El modelo actual que tenemos, basado casi en exclusividad en la industria del automóvil, es una bomba de relojería en el medio-largo plazo. Nuestro deber como representantes públicos debe ser favorecer la diversificación de la industria y apostar por sectores verdes que crean empleo digno y sostenible”, apunta Oscar Fernández.
En todos los foros económicos e industriales, a nivel local y a nivel global, se está hablando de la transición ecológica de la economía, especialmente en el sector secundario. Sin embargo, el Alcalde no dedicó ni una sola palabra a esta cuestión en el debate del Estado de la Ciudad y tampoco se han articulado políticas en este sentido desde el Departamento de Empleo. Consideramos preocupante esta actitud del Gobierno municipal y considera que se debe cambiar el rumbo para asegurar un modelo económico sostenible.
También señalamos que es necesaria una nueva cultura empresarial y organizativa, entorno a la propiedad colectiva y a la democratización de las relaciones laborales en el seno de la empresa.