Es un hecho que la reforma del sector eléctrico aprobada a finales de 2013 ha supuesto un encarecimiento del coste de la energía. Las consecuencias se han dejado sentir en las economías familiares, pero también en las empresas. En este sentido, el Gobierno Vasco ha venido denunciando reiteradamente los graves perjuicios que este incremento de costes supone para la competitividad de las empresas vascas.
A finales de 2014 el PNV llegó a un acuerdo con el Gobierno Central para rebajar el coste de la electricidad a las empresas vascas. El acuerdo supone la creación de un nuevo tramo de tensión eléctrica aplicable únicamente a clientes industriales en Euskadi, que les permitirá ahorrarse hasta treinta millones de euros en peajes de acceso a la red. Adicionalmente a este acuerdo, este mismo mes el Gobierno Vasco ha remitido una nueva lista de peticiones al Gobierno Central, con el mismo objetivo. Entre las medidas propuestas están la reestructuración del actual sistema de interrumpibilidad, exenciones fiscales transitorias, o el traslado a los Presupuestos Generales del Estado de parte de los extracostes sociales y no peninsulares incluidos actualmente en el recibo de la luz.
EQUO Euskadi rechaza estas maniobras del Gobierno Vasco, que no van a la raíz del problema y no buscan las soluciones adecuadas. Tanto las medidas propuestas como las que ya están en vigor tienen el mismo efecto final: trasvasar los costes de las empresas a la ciudadanía. Las exenciones fiscales reducirán la recaudación, lo que deberá compensarse a través de otros impuestos. Además los peajes de acceso que no paguen las empresas vascas deberán pagarlos el resto de usuarios. El traslado a los Presupuestos de una parte de los extracostes que deberían asumir las empresas supondrá recortes en otras áreas. EQUO Euskadi considera inadmisible que la ciudadanía que sufre la pobreza energética, deba además asumir un mayor coste en sus recibos de la luz para salvaguardar la competitividad de las grandes empresas de nuestro territorio.
La postura del Gobierno Vasco persigue un abaratamiento artificial del coste de la energía para la industria. Sin embargo EQUO Euskadi defiende un replanteamiento de todo el modelo energético actual, a través del autoconsumo y la generación descentralizada de energía de origen renovable, que suponga una reducción real de los costes. La mayoría de las grandes empresas podrían generar su propia electricidad, por ejemplo mediante instalaciones solares, lo que les permitiría reducir notablemente su factura energética. Incentivar este tipo de inversiones en las empresas, o negociar con el Gobierno Central para eliminar las trabas al autoconsumo son, en opinión de EQUO, las medidas por las que el Gobierno Vasco debería apostar. De esta forma no sólo se beneficiarían las grandes empresas, sino la sociedad en su conjunto. Es indudable que lastrar la competitividad de nuestro sector industrial con un alto coste energético no es deseable, pero la solución nunca puede ser trasladar esos costes a la ya castigada economía de la gente.