Ayer, el Parlamento Vasco rechazó la prohibición expresa del fracking en los Espacios Naturales Protegidos como solicitaban las Juntas Generales de Álava. Por contra, la modificación de la Ley 16/1994 aprobada permitirá que sea el órgano gestor de cada espacio protegido el que decida si la práctica del fracking es compatible o no con los ecosistemas que se pretenden proteger.
Para EQUO, la decisión adoptada por el Parlamento supone un paso atrás en la protección de los espacios naturales y en la lucha contra el fracking. Mientras comunidades vecinas se posicionan claramente en contra de está técnica tan agresiva para el medio ambiente, el territorio y la sociedad, la Comunidad Autónoma Vasca continúa invirtiendo dinero público en desarrollar esta técnica a pesar de la oposición ciudadana.
Esta medida supone un nuevo avance de las pretensiones de las empresas que están impulsando el empleo de la técnica del fracking en España. Hay que recordar que ayer mismo salió adelante en el Congreso de los Diputados la Ley de Evaluación Ambiental, una norma que simplifica los trámites necesarios para que las empresas adjudicatarias de permisos puedan llevar a cabo perforaciones de explotación de recursos no convencionales, algo que venía solicitando Shale Gas España, el lobby que reúne a dichas empresas.
EQUO Euskadi quiere, además, resaltar las posibles presiones que pueda ejercer el lobby profracking sobre los órganos de gestión de los Parques Naturales. EQUO entiende que una prohibición expresa de dicha técnica regulada por ley no dejaría en está situación vulnerable a dichos gestores.
EQUO Euskadi aboga por ir un paso más allá y prohibir expresamente el empleo de la técnica de fracturación hidráulica en toda la Comunidad Autónoma y para ello apoyará cualquier ILP que se presente en este sentido. Además, solicita al Gobierno Vasco que deje de invertir en esta técnica y que abra un proceso de participación ciudadana real para establecer los pilares del nuevo modelo energético vasco.